El Jurado está ahora deliberando para seleccionar a las 20 vivencias que pasarán a la "semifinal". Además de valorar las vivencias bien escritas, con estilo depurado y bellas, elegirá textos con "sustancia". Vivencias que una vez leídas, induzcan a la reflexión o al debate. Que nunca nos dejen indiferentes, que aporten, que nutran nuestro espíritu, que nos hagan crecer.
Aquí tenéis la vivencia que OROLA escribió en su tomo III sobre la sustancia:
SUSTANCIA
El problema de la vida es problema de sustancia.
¿Qué queda de la vida?
¿Qué hay por encima, o por debajo, o dentro de la vida?
Buscamos la sustancia.
De las ideas, de las personas, de las cosas.
Nos preocupa, por encima de todo, lo sustantivo.
La sustancia es lo que queda, una vez que nos hemos
desprendido de lo accidental, de lo superficial, de lo adjetivo....
Más o menos sustancia.
No depende del tamaño, ni de la forma,
ni del volumen, ni del tiempo, ni del espacio.
La sustancia es lo que más se acerca a la esencia.
Sustancia.
Todos sabemos que nuestra vida tendrá la sustancia
que le queramos dar.
Tener sustancia.
Todo hombre tiene una sustancia de doble función.
Por una parte, la que le sirve para desarrollarse;
por otra la que tiene que crear en circuito cerrado
a partir de su experiencia.
Hay quienes no se preocupan nada de la sustancia.
Sólo viven para lo accidental, pasajero, efímero.....
“Es una persona insustancial”; y cuando dicen esto de alguien
nos parece como si su personalidad quedara totalmente desvirtuada.
Los seres insustanciales llegan al término de sus vidas
y se encuentran defraudados: para ellos la vida no tiene sustancia.
Y la vida tiene una sustancia densa, jugosa,
que está en la propia raíz del hombre.
Una sustancia totalmente inmaterial: la fe.
La sustancia de cada vida, de cada hombre
es distinta porque es distinta su fe.
Nos damos cuenta de que la sustancia de una persona
está en relación con su deseo de perfeccionamiento individual.
El hombre, sustantivo.
Sustantivo de todo lo que es y puede ser.
Dar con la sustancia del hombre es dar con su esencia.
P.S. y la esencia está latente en la presencia de los que dejan escrito, en los libros y en el alma, las palabras de los que nunca pudieron hablar de lo que sentían y se dedicaron a ser insustancialmente ajenos a la vida.
ResponderEliminarLa sustancia está en las palabras bien utilizadas y en las que se agolpan, a lo loco, creando adjetivos y adjetivando palabras.
Sencillamente literarias.
Gracias, una vez más, por dar calidad a las vivencias
Elena P.
Gracias Elena por tus comentarios que elevan el tono de este BLOG. Tu acertada mención a la "Esencia" me da pie para publicar en el próximo post una vivencia que tenía escrita sobre la misma.
ResponderEliminarUn saludo
Un placer, Fernando, leer este blog (vaya palabro) y leer las vivencias de las anteriores antologías. La mía, un año más, está entre las 100 seleccionadas, si bien en esta ocasión no entre las finalistas. Un placer volver a participar en la antología y, especialmente, leer esos pedacitos de vida que tantos dejan escritos gracias a este concurso. Ya estoy desando saber quién ganará este año.
ResponderEliminarUn saludo