Como venimos haciendo en días anteriores, seguimos publicando vivencias de
la Antología 2013.
BESO
“No sé si volveremos a vernos, pero nunca olvidaré la
senda
de tus besos”, le dijo el hombre a la mujer, el pez al
agua,
el aceite al ánfora, la hoja al alisio…
Ahí supieron que querer estar cerca depende de dos,
y de las palabras que se ponen por testigo de unas
eternas ganas
de permanecer.
Lo siguiente fue un suspiro leve, elevado a la quinta
esencia
de un “cuando regrese” difuminado en el vagón de un tren,
perdido en la pasarela de un barco oculto o diluido en la
última
llamada de un aeropuerto.
Les cayó encima la lluvia incontrolada de pequeñas
pasiones
estallándoles en el cuello, en el desfiladero turgente de
los senos,
en las praderas de ignota piel, en las marismas del
planeta
cuerpo… en las orillas amables del Polo Opuesto.
Luego todo fue fácil. Todas las canciones del mundo
hablaban
de ellos.
Luis Miguel Carreras Jiménez
ARRECIFE DE LANZAROTE (LAS PALMAS)
(VII Antología pág. 63)
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