Como venimos haciendo en días anteriores, seguimos publicando vivencias de
la Antología 2013.
GREGUERÍAS POR LA VIDA
Nada impide que cualquiera se pregunte si esta vida es el
barrunto
de otra vida tras la muerte.
Incontables veces muere el hombre en la novela de su
vida.
Para morir lo único imprescindible es estar vivo.
Síntoma no menor de un mal de muerte
es que te entre el sudor frío de los botijos.
Si la prisa nos lleva a la muerte,
ralentizándonos saborearemos la vida.
Yo siempre había creído que quien vive en la tierra,
come en la tierra y no anda en la tierra, es el gorrión,
pero resulta que eso le pasa sin duda también al genio.
Un filósofo sabía que haciendo más cristalina el agua
se lograría ver mejor la profundidad del pozo.
Elijo ver el mundo como es, y vivir y amarlo.
Carmen Molinero Fraguas
(VII Antología
pág. 45)
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