viernes, 26 de marzo de 2021

ANTOLOGÍA 2020: OLOR A PÓLVORA

 



OLOR A PÓLVORA
 
El olor a pólvora aún parece acunarse en el viento. Ante las pupilas acuosas del indiano, aplastadas por la canícula de agosto, cimbrean las cañas de azúcar dormidas del Valle de los Ingenios, a las afueras de Trinidad. Lo envuelve todo un aire sofocante, perfumado de hierba caliente y ausencias. En su mano, una maleta acartonada y una nostalgia incipiente que se desborda antes de volver a cruzar el gran puente azul entre silencios y miedo. Al otro lado, cuanto queda de la madre patria. Desarbolada, cercenada, rota.
 
El desenlace de la guerra le obliga a despedirse de la tierra de guanajatabeyes, siboneyes y taínos. Del parloteo despreocupado de guajiros, derramándose en la mañana como el borboteo de una fuente sobre abrevaderos olvidados. De los paseos a media tarde por el dédalo de calles que tejen el corazón de la capital, La Habana Vieja, entre el colorido silencio de sus iglesias, conventos, palacios coloniales, patios enrejados y casas enjalbegadas. De los cremats regados con ron añejo y el recuerdo de los marineros catalanes. De una melodía de pieles que, más allá del blanco y el negro, beben del color de los terruños fecundos, del café, de las hojas de tabaco que se prensan y retuercen tras los muros de la fábrica Partagás. De un vínculo eterno entre dos pueblos.
 
Piensa el indiano que es imposible abandonar Cuba. En cuanto regrese a España, la memoria lo traerá de vuelta a los campos antillanos. Al olor a pólvora que empieza a borrar la brisa.
 
Cèlia Roca Martín
Nacida en BARCELONA en 1980
Licenciada en Periodismo, Humanidades y Asia Oriental. Máster en cultura asiática y marketing digital
Trabaja en el ámbito del marketing de contenidos y como periodista
(XIV Antología)
 
 


No hay comentarios:

Publicar un comentario