DESPEDIDA
Allí
se quedó llorando…
No fue capaz de levantar la cabeza y mirar, no, no tuvo fuerzas para verlos partir. Madre sin hijos a quienes custodiar, esposa sin hombre a quien acudir.
Derramó los ojos sobre sus manos cuarteadas y pensó aquello que le habían narrado.
Pueblos inusitados, mezcolanza de colores, terrenos inacabables. Regresó a sus manos (aparejos laboriosos), que perfilaban una vida de trabajo, de heroicidades y de batallas ganadas. Ahora vacías, ahora huérfanas de entusiasmo.
Allí se quedó llorando…
«El Nuevo Mundo», gritaron ellos, soñadores y valientes. Se libraron del añoso hollejo de lo hispánico. Desmesuras sobre sus ojos. Quijotes y Sanchos selváticos.
Allí, allí se quedó llorando…
Y con los dedos recién enlutados, escarbó, trémula, debajo de su corpiño buscando íntimo alivio en Padre Dios Santo, entonces y siempre su único destino. En su vientre, en su pecho castellano. «Padre, el Nuevo Mundo» de patria y novedades los labios colmados, ventura de mujer acuchillada, y allí, allí se quedó llorando.
(Viajes
que hicieron al hombre grande,
tristes las casas con mujeres aguardando).
Montserrat Espinar Ruiz
Nacida en VALENCIA el 8 de abril de 1980, reside en Catarroja
(XIV Antología)
No fue capaz de levantar la cabeza y mirar, no, no tuvo fuerzas para verlos partir. Madre sin hijos a quienes custodiar, esposa sin hombre a quien acudir.
Derramó los ojos sobre sus manos cuarteadas y pensó aquello que le habían narrado.
Pueblos inusitados, mezcolanza de colores, terrenos inacabables. Regresó a sus manos (aparejos laboriosos), que perfilaban una vida de trabajo, de heroicidades y de batallas ganadas. Ahora vacías, ahora huérfanas de entusiasmo.
Allí se quedó llorando…
«El Nuevo Mundo», gritaron ellos, soñadores y valientes. Se libraron del añoso hollejo de lo hispánico. Desmesuras sobre sus ojos. Quijotes y Sanchos selváticos.
Allí, allí se quedó llorando…
Y con los dedos recién enlutados, escarbó, trémula, debajo de su corpiño buscando íntimo alivio en Padre Dios Santo, entonces y siempre su único destino. En su vientre, en su pecho castellano. «Padre, el Nuevo Mundo» de patria y novedades los labios colmados, ventura de mujer acuchillada, y allí, allí se quedó llorando.
tristes las casas con mujeres aguardando).
Nacida en VALENCIA el 8 de abril de 1980, reside en Catarroja
(XIV Antología)
No hay comentarios:
Publicar un comentario