INOPORTUNA
OPORTUNIDAD
Nos tocó
bailar con la más fea. Su ritmo era frenético mientras las suelas de nuestros
zapatos resbalaban en cada incertidumbre: quizá logréis pagar mañana, o igual
para el mes os conceden la beca, si no os quitan el subsidio y hay gobierno
que, al fin, saque ayudas al alquiler.
Jamás
logramos seguir su paso, aunque lo intentamos.
Mientras
ella también quería parecerse más a sus fotos de Instagram, nosotros tratábamos
de evitar una única cosa: desconectarnos. El mundo ficticio nos ayudaba a
parecer lo que tanto nos costaba ser. Llevamos auriculares a todo volumen para
simular que nunca nos damos cuenta, pero sí, siempre lo supimos. Nos atrevimos
a comparar nuestros salarios y la renta media del alquiler y fue entonces
cuando descubrimos que hasta el gato encerrado queda a deber vidas.
Dejamos de
aparecer en las noticias como cuando aspirábamos a ser un recuerdo, pero
teníamos que llegar a fin de mes. «Sois el futuro», nos dicen nuestros mayores
recordando su propio «Vamos a “facer Españas”». Buscamos a nuestro propio dios,
al que llamamos «cómo».
Cómo
decirles que sentimos que este país pisa mucho más que camina. Cómo decirles que para nosotros
siempre es pronto para darnos por vencidos y muy tarde para caer rendidos.
Y al fin lo
logramos, desatamos nuestros zapatos encerados de incertidumbres para bailar
con nuestros sueños. Mejor descalzos, mejor mestizos. Solo así apareció ella,
la que no sabía bailar, pero su nombre sonaba a Sabina: inoportuna oportunidad.
Aida Soilán Enríquez
Periodista y escritora
Blog: https://elswingdelozono.wordpress.com
(XIV Antología)
Periodista y escritora
Blog: https://elswingdelozono.wordpress.com
(XIV Antología)
No hay comentarios:
Publicar un comentario