Autor: Enrique López Oneto, de Torrelodones, Madrid
ALCOHÓLICO
Soy alcohólico. Y admito que es una enfermedad, un vicio, un error y hasta un pecado.
Y brindo porque los demás me admitan como un enfermo, un vicioso, un equivocado y un pecador. Es decir, brindo por ser admitido como un hombre.
PEREGRINO
Por fin he alcanzado mi meta. Y ahora, ¡qué frustración! ¡qué nostalgia del camino!
Y yo brindo contigo para que los enfermos, viciosos, equivocados y pecadores, sean simplemente admitidos y no excluidos.
ResponderEliminarRevelador!
ResponderEliminar