Como
venimos haciendo en días anteriores, seguimos publicando vivencias de la
Antología 2013.
UN DÍA ORDINARIO
Es de locos llegar a casa al mediodía. Tirar los zapatos,
el bolso
y la chaqueta a medida que entro en el piso, cierro la
puerta
con el pie y desconecto la alarma, enchufo la tele y
sintonizo
un canal de información. Mientras se calienta la comida
en el microondas y se va haciendo el café, me pongo ropa
cómoda,
consulto mi correo electrónico mientras como.
Cuando termino tomo una corta sesión de rayos UV
y una más larga en el jacuzzi con una gota de aceite de madera
de rosa. Me visto y me dirijo relajada al coche para
volver
a empezar sin saber a qué hora terminará mi jornada
laboral.
Alba
Piñol Farré
TEGUESTE
(Santa Cruz de Tenerife)
(VII
Antología pág. 269)
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