jueves, 26 de marzo de 2015

ANTOLOGÍA 2014: DESFILE EN VALENCIA

DESFILE EN VALENCIA

La luminosa y florida plaza frente al Ayuntamiento, estaba poblada
por un gentío alineado en el borde de las aceras, esperando un
desfile que, todavía invisible, se acercaba lentamente, anunciándose
con un marcial y atronador sonido de tambores y cornetas. Por fin
la marcha llegó frente a mí. Pasaban en marciales columnas de diez
o doce en fondo, encabezados por varias filas de músicos y detrás,
cubriendo toda la ancha calzada, siempre prolijamente alineados,
venían multitud de hombres portando banderas y gallardetes a
franjas amarillas y naranjas.

Detrás de los músicos, en el centro de la calzada, sobre
una plataforma rodante, escoltado y empujado con un respeto
casi religioso, se erguía un gigantesco caballo blanco de unos cinco
metros de largo por unos tres o cuatro de alto, con la cabeza,
la cola y las patas articuladas. No quise preguntar en ese momento,
solo miraba asombrado el aspecto marcial y silencioso de los
caminantes y las variadas actitudes de los muchos espectadores que
contemplaban su paso.

Al volver al hotel, el noticioso televisivo informaba sobre el desfile
de la plaza, haciendo mención que desde algunos balcones se habían
arrojado numerosos huevos y algunas piedras, lo que había originado
incidentes y corridas. "Son los catalanistas -dijo el conserje- que
quieren que Valencia pase a formar parte de Cataluña, porque dicen
que el idioma que hablamos, lo trajo Jaime I cuando nos liberó de
los árabes en el año 1238; pero se equivocan, aunque se parezca al
catalán, el idioma valenciano ya lo hablábamos bajo la dominación
árabe".

Así supe de un conflicto regional que se empeña en desdecir aquello
de que “hablando se entiende la gente”. Tal vez, de aquí heredamos
los argentinos la tendencia a dividirnos.

Alberto Ernesto Feldman
Nacido en BUENOS AIRES en 1941
Jubilado
(VIII Antología pág. 175)


No hay comentarios:

Publicar un comentario