ESPAÑA; ARQUITECTA DE PASIONES
Hablo… desde; el descender de las mieles y a su vez las
nieblas de la madurez.
Hablo… desde; el tiempo haciendo historia, acariciando
las laderas de la vida, evocando a la enciclopedia y a los recuerdos, labrados
por el dolor y algún que otro desengaño.
Hablo… desde; las historias sin barnizar, al igual que
las piedras del río, bañándose desnudas y que tú mi España también un día,
bañaste en lunas nuevas las miradas, poniendo los andamios para llegar al
entendimiento.
Hablo… desde; los ojos que se posan sobre las magras
frías, recorriendo los dedos litorales pintados, añorando el emigrante su
tierra y sus gentes, arraigadas dentro de sus entrañas.
Hablo… desde; la voz del pueblo que hermana las culturas,
ganando la carrera a las lágrimas del viento, siendo vínculo de entendimiento y
universalidad.
Hablo… desde; las antiguas geografías, de la sangre hecha
allí, donde la tierra de emigrantes fue infecunda, desnudos los archivos, ya
sin hombres los caminos, sin huellas y sin voz, a hombros se llevaron la vida,
los recuerdos y las canciones.
Hablo… desde; que un puñado de ideales, empujó a barcos y
hombres, «¡tierra!», un grito emocionado, avistando la isla de Guanahaní, por
Rodrigo de Triana.
Hablo… desde; gritar en Machu Picchu o albergar el
orgullo de los Libertadores.
Hablo… desde; los buzones de la ausencia, difusos los
retratos, huecos del alma que en el hoy solo se mezclan los recuerdos, habiendo
devuelto la voz de sus hijos recobrados.
Hablo… desde; la mezcla de pasión y canto, edificando,
restaurando y ejecutando el proyecto, siguiendo los planos y los planes de no
perder la medida de «facer Españas».
Mª del Carmen Agudo
Serna
(IX Antología)
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