SEMBLANZA DE
UNA PIEDRA SILLAR
Viendo
un cuadro en la sacristía de la catedral de Sevilla, me entró curiosidad por
saber más de aquel santo obispo y me puse a indagar. Para curiosos como
yo, dejo constancia de mis descubrimientos.
Isidoro
fue hombre de palabra y de palabras. De palabra, porque no temía darla ni
cumplirla. De palabras porque escribió muchas y leyó otras tantas. Con su obra Etimologías,
hoy considerada la primera enciclopedia de la Edad Media, deseaba abarcar todos
los saberes de la época y prueba de ello son los veinte tomos de papel que
redactó a mano.
Cultivó
la amistad con poderosos y mendigos. El rey visigodo Sisebuto le dedicó su Carmen de Luna
y por invitación del rey Sisenando dirigió el concilio de Toledo. Menos
conocidas, sin embargo, son sus correrías para repartir judías y lentejas
a los pobres, mantas a los menesterosos y consuelo a los
encarcelados o el tiempo dedicado a los niños hispalenses para
enseñarles el abecedario mientras les contagiaba su propio interés por las
estrellas, las hierbas medicinales y la historia.
Fue
el pequeño de cuatro hermanos. Leandro, ejemplo de fortaleza para Isidoro;
Fulgencio con quien compartía el gusto por las aceitunas y Florentina,
fundadora de más de cuarenta monasterios, a quien para hacerla rabiar llamaba «Florentona».
Gustaba
de pasear por los viñedos y saborear la uva joven del Bajo Guadalquivir,
contemplar el paisaje de los palmerales y escuchar a los mirlos,
petirrojos, herrerillos, verdecillos, jilgueros y vencejos que pueblan la
ciudad de Sevilla.
Este
hombre sencillo y erudito a la vez, generoso para dar y pobre para poseer,
elocuente y discreto —sin que haya contradicción en ello—, sereno en sus
reflexiones y decidido a la hora de actuar fue una de esas piedras
sillares que construyeron el reino de las Españas.
Beatriz Gómez-Pablos
Nacida en Las Palmas de
Gran Canaria
Profesora de Lengua y
Lingüística Española en la Universidad Comenio de Bratislava (Eslovaquia)
Antologizada en ocho ocasiones
en los Premios Orola
(XVII Antología)
No hay comentarios:
Publicar un comentario