- ¿Cómo empiezan las despedidas? ¿Y dónde? ¿Y cuándo? Y también quiero saber: ¿Cómo terminan las despedidas?
- La noche que te vi, me reencontré con mi ángel, que estaba enfermo por el acoso de mi demonio. Me ayudaste. Conseguiste lo que yo no podía, hacer feliz a mi felicidad.
- La ausencia de mi padre me ha enseñado muchas cosas que me han ayudado a vivir. La vida no cesa, no espera ni olvida. Yo procuré vivir sin ira ni rencor.
- Ahí estás. Ahí estás. Me parece mentira después de tanto tiempo, aquel amor en tu carne sigue vivo y en mi recuerdo languidece de nostalgia.
- Nos equivocamos. Al fin y al cabo yo sólo quería besarte. Y quedarnos dormidos en aquel valle…tan cercano y a la vez tan lejano, mirando las montañas que me regalaste.
- Cuando despierte estaré vacía. Me gustaría pedirte que volvieras, pero es absurdo, nunca aprendimos a ser felices.
- Nace la generación de la lengua, defensores de la morfología, artistas de la sintaxis. ¡Muramos por la lengua! Soñé el otro día algo utópico, pero bonito.
- Octubre. Una lágrima tuya cayó al Sena. Luego pasó noviembre esperando la Navidad. Diciembre se despierta y el fantasma aún aguarda, como yo, que puedas perdonarme y que regreses.
- Día del abuelo, del abue, del taita, del nono, del padrecito, de la madrecita, ¿por qué no? ¡Sí! Ellos son mis segundos padres, los que me prodigan mucho amor, caricias y comprensión.
- Un momento para comprender, para apreciar todo lo que la vida me ha dado y me da día a día. Amar y sentir en lo más profundo la solidaridad y el amor hacia todo.
- Mirar, dejarse ver, destapar y seguir desvistiéndose entre sueños desmedidos que no caben en el cuerpo que los sueña. Ser alma y puerta, paz y sosiego, cuerpos sin ropa, anhelo nuevo.
- Hoy te voy a respirar. Voy a mirarte desnuda, tranquila… Déjame quererte que tengo miedo. Duérmete mientras te sigo. No te preocupes por nada, descansa…yo cierro.
- No tengo miedo y sale de mí el amor. Puedo quererte, porque yo te he creado y tienes una imagen con mil nombres. Eres pensamiento de hoy y para siempre.
- A la salida de un centro de niños discapacitados. Caminan de la mano, como novios. Ella lo ama con amor tan inmenso como el tiempo que dista a las estrellas. Él busca su cobijo en la sonrisa que le dedica ella.
- -Mamá, ¿el alma duele? -Claro, hijo, el alma duele. Y sufre. Y llora. -¿Y tú por qué lloras, mamá? -Por ti, hijo mío.
Los autores y títulos de estas vivencias son:
- Marlon James Sales (“Despedidas”)
- Saúl (“Pilar”)
- Javier Fenollar Cortés (“Lo que quedó…y no verá”)
- Poupée (“El regreso”)
- Cristina Orejas de Soto (“El valle”)
- Marta Ruiz García (“Retención”)
- Víctor García González (“Manifiesto social y llamada al orden lingüístico)
- Mónica Difulvio (“Fiel espera”)
- María Guerrero de Fonseca (“Abuelos y abuelas en su día”)
- Mª Rosa Domingo Barnils (“Un momento…”)
- Bibiana Lucía Pacilio (“Desnudez”)
- David Ruiz Carrillo (“Respirarte”)
- Joaquina Ingelmo Sánchez (“Necesitaba que existieras”)
- Paloma Casado Marco (“Como novios”)
- Reyes González Simón (“Diálogo”)
Me llego al,corazón ♥
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