Como
venimos haciendo en días anteriores, seguimos publicando vivencias de la
Antología 2013.
CARICIAS
Una simple caricia. Suficiente para hacerme temblar,
para hacer que mi piel se convierta en un emisor de
centelleantes
y luminosas señales. Emergen de muy dentro y logran
traspasar
una frontera invisible, casi imperceptible… pero ahí
están.
Y las quiero para mí. Para sentirlas cada vez que no
estés a mi lado.
Y ahí comienza todo. Con la imperiosa necesidad de
establecer
contacto, físico o emocional, pero contacto. Y entonces
te acercas,
como un susurro, y me hablas despacio, como cantando,
pero sin palabras. Y me miras, y me estremezco.
No tengo palabras para describir todo lo que me haces
sentir,
solo con sentirte. Ni tengo forma alguna de agradecerte
cuánto me haces vibrar al dejar que te contemple.
Gracias, mi pequeño. Tu pureza y tu dulzura me invaden y
me
recuerdan que cuando ya no seas mi pequeño ahí estarán
nuestras
manos para unir dos almas indivisibles.
Reyes
González Simón
Licenciada
en Periodismo
MADRID
(VII
Antología pág. 257)
No hay comentarios:
Publicar un comentario