A TRAVÉS DEL TIEMPO
(A mi madre, que tanto la echo de menos)
Paso las hojas
despacio, con ternura,
casi con miedo,
temiendo dañarlas,
como una madre con
su recién nacido.
Dibujo visualmente
la silueta de cada letra,
esas que amalgaman
en su seno a millones de almas.
Con los dedos
recorro sus formas elegantes,
sinuosas,
desafiantes, incluso agresivas.
Me alejo, las
observo,
expectante, como si
de un momento a otro
fueran a iniciar
una conversación.
Me acerco, musitan
en mi oído,
me atrapan,
esparcen su aroma evocando lugares,
olores y sabores aletargados
en mi memoria,
transportándome a
mundos lejanos.
Palabras que se
convierten en sonido de cascos
rebotando contra el
suelo,
«Santiago y cierra
España»;
otras bailan
esparciendo el bullicio en las calles toledanas,
perfecta simbiosis
de tres culturas;
algunas dejan fluir
el agua que susurra en la altiva e infiel Alhambra,
escucho el cruce de
espadas que la convierte,
orgullo cristiano.
Tierra creciente,
expandida hacia los
cuatro puntos cardinales.
Los tercios,
implacables, aun en la noche guerrean;
mientras, el aroma
del mar con su vaivén sosiega el ánima,
meciendo el cuerpo
en un viaje a través de mi querida patria,
desde su nacimiento
hasta este instante.
Paso las hojas
despacio, con ternura.
La vida, la muerte,
las risas, los lloros…
Lola Sánchez Lázaro
Licenciada en
Historia
(IX Antología)
¡¡¡¡Muchas gracias!!!!
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