jueves, 26 de septiembre de 2024

«RE-VIVENCIAS»: DELICADEZA

 



                       DELICADEZA

 

 Delicadeza. Es la manera de ser de las personas que tienen sensibilidad.
 
Son delicadas las personas que aman sin avasallar.
 
Las personas delicadas no se acostumbran a la ley de la selva
que todavía rige en la sociedad.
 
Una palabra, un gesto, pueden a veces más
que muchas compensaciones materiales o económicas.
 
Lo que cuenta es la postura interior,
la que condiciona nuestra forma de ser y actuar.
 
Cuando no se tienen en cuenta los sentimientos de las personas
no cabe hablar de delicadeza.
 
Nunca la delicadeza ha de basarse en el temor al daño propio,
sino en evitar el daño que se puede infligir a los demás.
 
La delicadeza, debe superar su propia fragilidad,
que supone en cierto modo indefensión
a través del desarrollo máximo de la inteligencia.

 

(Fernando Orlando,1967)
 


miércoles, 25 de septiembre de 2024

ANTOLOGÍA 2023: ADDENDUM

 



ADDENDUM
 
 
Manuscrito hallado en el epistolario del obispo Braulio de Zaragoza, continuación de la carta conocida como Obitus beatissimi Isidori Hispalensis episcopi, atribuida a Redempto, clérigo de la iglesia de Sevilla.
 
«Al piadosísimo y venerable obispo Braulio, de su humilde siervo Redempto:
 
De nuevo me dirijo a vuestra santidad tras la triste muerte de vuestro amigo y mi señor, el muy bienaventurado Isidoro. Tan conturbados estaban mis sentimientos cuando con detalle di cuenta de su confesión ante Dios y de su penitencia in extremis, y de cómo abandonó este mundo, que solo ahora advierto haber omitido el relato de un sueño que la víspera de su tránsito Isidoro con gran ansiedad me reveló y que yo aquí con la ayuda de Dios me limito a repetir: “Y soñé que todos los pueblos de Hispania florecían bajo la corona de dos grandes reyes unidos en católico matrimonio. Y ni astures ni cántabros ni vascones ni judíos ni bizantinos alzaban sus armas contra ellos, pues todos se decían hispánicos y a ellos rendían tributo. Y esos reyes hallaron un nuevo mundo, bendecido con abundancia en oro y piedras preciosas. Fértil, pródigo en bosques, pastos y animales de toda especie. Y hasta las gentes que allí habitaban llevaron la fe en Dios. Y nuevos reyes dieron en extender la gloria de la mater Hispania por nuevas tierras. Y a tal punto creció la grandeza del reino que de oriente a occidente no había príncipe que no alabara sus virtudes y no envidiara sus dones”.

Siendo que sois hombre versado en asuntos humanos y divinos, podréis juzgar si este sueño, del cual a nadie hablé, es desvarío de moribundo o si es premonición y acaso llegue el día en que veamos la gloriosa Hispania que vuestro amigo y hermano en Cristo Isidoro soñó.
Rogad por mí, beatísimo señor.
 
Pridie idus apriles, era DCLXXIIII».
 
 
 
*La fecha de la carta se ha situado el 12 de abril del año 674, que, aplicada la corrección de treinta y ocho años para adaptarlo al calendario gregoriano, corresponde al 636, esto es, ocho días después de la muerte de san Isidoro de Sevilla.
 

 
Ricardo Cano García
Natural de Gijón (Asturias), reside en Zaragoza. Entre medias: dos países, muchas ciudades y una vida de experiencias
Premio Defensa a trabajos de estudio e investigación
Comenzó a escribir relatos en 2020. Ya son once los reconocimientos conseguidos
(XVII
Antología)
 

martes, 24 de septiembre de 2024

ASÍ ESCRIBEN NUESTROS AUTORES

 


«Seis de la mañana y san Isidoro lleva ya varias horas buscando entre los doctores de la Iglesia la inspiración que no encuentra. Juraría que lo había leído en un libro que no sería más grande que dos palmos y su portada de un bermellón como el petirrojo que solía entrar en la biblioteca y cuyo pecho contrastaba con los artesonados verdes. Recuerda vívidamente el color, haberlo tenido en sus manos y hasta el lugar donde lo consultó por última vez hace más de medio año; el autor ni siquiera aparece en su memoria en lo más mínimo. Ha revisado ya mil veces las obras tanto de san Agustín de Hipona como de san Gregorio Magno y nada. Era una frase lapidaria de esas que se te graban por dentro y juró cuando la leyó y la releyó que nunca se le olvidaría y que sería la base y fundamento de su siguiente escrito…» (pág. 134, Raquel Hernández Contreras, «Olvido»).


lunes, 23 de septiembre de 2024

ANTOLOGÍA 2023: MILAGRO EN HISPALIS

 



MILAGRO EN HISPALIS
 
 
Mi rey don Fernando:
 
Os escribo esta misiva desde la tierra infiel de Hispalis donde grandes portentos han acaecido.
 
Sometido el bárbaro e hipócrita Abenabeth ante los ejércitos cristianos y dispuesto a rendir vasallaje y pagar parias a cambio de ansiada paz, recordaréis cómo el zorro agareno se ofreció a entregarnos cuantas reliquias cristianas sus manos pudiesen allegar en sus dominios.
 
Con ese afán, arribamos en embajada a la antiquísima urbe hispalense mi muy caro hermano, Alvito, obispo de León y mi humilde persona.
 
Nadie pudo darnos señas sobre los restos de la beatísima Virgen Justa, mártir en Jesucristo, mas el anciano Alvito, poseído de espíritu celestial tras un triduo de vigilia y rezos, fue agraciado con la visión en sueños del docto metropolitano, gloria de la Españas, san Isidoro, que indicó por tres veces a nuestro amado deudo el lugar de su propio osario. Y como recompensa a su incansable celo, anunció al venerable que sería llamado a reunirse con el Creador. Así pues, señalada la olvidada tumba y exhumado el cajón que contenía el bendito cuerpo, adoleció de rápida enfermedad, penitenció siete días por la salvación de su alma y feneció en olor de santidad.
 
Asimismo, se cuenta que el ismaelita, asesorado de astrólogos y estrelleros, teme el cumplimiento de una profecía relatada por el sapientísimo Isidoro, quien predijo en su lecho de muerte el fin de la secta mahometana en Hispania cuando sus reliquias fuesen rescatadas por siervos de la fe verdadera de tierras apóstatas y que un rey, de nombre Fernando, enarbolando su pendón, reconquistará toda la Bética y unificará, como en los tiempos pretéritos en que ejerció su ilustre arzobispado, la península toda en un único y renacido reino de España.
 
Ordoño, obispo de Astorga
 
 
Juan Núñez Guerrero
Nacido en La Puebla de los Infantes (Sevilla) en 1966
Licenciado en Geografía e Historia, especialidad Antigua y Medieval
Bibliotecario
Publicaciones: Écija musulmana. Historia política; El cisma del PSOE. El mitin de Écija (31 de mayo de 1936). Violencia interna en el PSOE durante la primavera del Frente Popular y el relato «El prisionero de Segura» ganador del VI concurso de relato histórico Domingo Henares convocado por el Excmo. Ayuntamiento de Puente de Génave (Jaén, 2017)
(XVII Antología)
 
 
 
 

viernes, 20 de septiembre de 2024

ANTOLOGÍA 2023: DESDE LOS BALCONES DEL CIELO

 



DESDE LOS BALCONES DEL CIELO
 
 
Alvito fue preparando su alma para el inminente encuentro con el Señor tras la advertencia que san Isidoro le hubiera hecho en sueños o quizá aparición.
 
Había aprendido que a veces una cosa se busca y otra se halla. Como en la oración, que se pide a Dios un favor, pero al final concede algo mejor. Detrás de dos santas iba y, en su lugar, san Isidoro en el camino se le hizo encontradizo, al punto que pronto estaría junto a él en el paraíso.
 
En el transcurso de la traslación de las reliquias, el cortejo fue sorprendido por más de un milagro y suceso, empezando por lo que el santo a Alvito le había anunciado referente a su próximo deceso.
 
Pero no todo concluía con eso, treinta y tres años exactos debían todavía suceder, la edad que tuvo Cristo, para que en 1096 una nueva cruzada fuese a acontecer, no a la tumba de Justa, Rufina e Isidoro, sino que a la del sepulcro vacío del mismo resucitado, en Jerusalén.
 
Los ángeles, desde los balcones del cielo, vieron a León enterarse cómo Isidoro había exhalado una fragancia desde el suelo, que se dispersó como fina niebla de néctar para luego emprender el vuelo. Y contemplaron el cuerpo del santo en andas, cubierto por tapices de seda y al rey Fernando descalzarse en el Duero para recibirlo sobre sus espaldas. Los nueve coros vieron a Isidoro ir al monarca y pedirle su cuerpo presente junto a Alvito, como ahora eran almas en el paraíso según Dios así lo tenía escrito. Y miraron el ingenio de Domingo de Silos como un gran misterio: tras su suave toque partió el caballo de Alvito a la catedral y el de Isidoro al monasterio.
 
El cielo admiró a Fernando imitar a Cristo, sirviendo el banquete él mismo, a la reina darlo a los pobres en comunión fraterna y a Alvito e Isidoro agradeciendo a María haberles alcanzado la vida eterna.
 
 
 
Francisco (Frank) Gámez Pascual
Español, primera generación nacida en América
Consultor en innovación y conferencista. Mercadólogo, publicista. Escritor y compositor
Ayuda a organizaciones a cómo pensar fuera de la caja a fin de inventar ideas y resolver problemas utilizando su propio programa y metodología (Pensamiento disruptivo) para generar alto calibre de valor relevante
(XVII
Antología)
 
 

jueves, 19 de septiembre de 2024

«RE-VIVENCIAS»: CAMINAR

 



          CAMINAR


 
Tú caminas por la vida y llevas luz al andar.
 
Tu caminar es recto, aunque tengas que bordear.
 
No te asusta la distancia, porque sabes adónde vas.
 
La vida es un camino difícil para andar.
 
Cada uno escoge su propio camino.
 
Escoger sí, a veces el camino real, otras el sendero montaraz.
 
Caminas pausada y firme, te guía la luz solar.
 
La noche es oscura y en el camino también hay que descansar.
 
En el camino vas dejando, día a día, tu vida.
 
¡Camina y vive! Con plenitud física o con esfuerzo vital.
 
Caminar juntos, sin descansar, hasta hallar la paz.

 
 (Fernando Orlando,1983)
 


miércoles, 18 de septiembre de 2024

ANTOLOGÍA 2023: EL VIAJE

 



EL VIAJE
 
 
¿Qué hacéis? ¿Por qué rompéis mi descanso eterno? ¿Por qué lleváis mis restos lejos de mi adorada Sevilla? Aquí nací, aquí viví, aquí me convertí en servidor de Cristo y de la Iglesia llegando a ser obispo, aquí me convertí en escritor infatigable compilador y recopilador, estudié e hice trabajos de historia y litúrgicos, tratados de astronomía y geografía, diálogos, enciclopedias, biografías de personas ilustres, textos teológicos y eclesiásticos, ensayos valorativos sobre el Antiguo y Nuevo Testamento, y ahora levantáis la tierra que me cubre y me trajináis por la península hasta tierras más frías como las de León. Sé que ahora mi estimada Sevilla está bajo gobernanzas musulmanas que adoran a otro dios, pero he estado aquí descansando más de tres siglos y me han respetado; ay, Fernando, rey de León, ¡queríais a santa Justa y Rufina y como no las hallasteis, tuvisteis que conformaros conmigo; ay, Fernando I, rey de León, que aceptáis regalos del nuevo ascendido al trono de Sevilla al-Mutámid para que durante cierto tiempo no haya guerra entre los dos, ya os va bien a ambos, uno para convalidar su nuevo reinado y a otro para resarcirse de la pobreza ocasionada por vuestras continuas luchas.
 
Me parecería bien todo que hacéis, rey Fernando, si fuera para bien de los cristianos, aunque mucho me parece que lo hacéis para enaltecer vuestra gloria.
 
Hoy, casi mil años después, la gente ha valorado mis estudios, mis conocimientos, aunque miro mi cuerpo y veo que algunas de mis pertenencias no están conmigo, me dicen algunas almas que conviven conmigo que están parte en el altar mayor de la parroquia de la Anunciación de Abla y parte en la catedral de Murcia.
 
 
Joan Vidal Padrós
Jubilado de cifras y números
Aprendiz de letras
Inventor de historias que le hacen soñar esperando que algún día hagan soñar a más personas
(XVII Antología)
 
 

martes, 17 de septiembre de 2024

ASÍ ESCRIBEN NUESTROS AUTORES

 





«En la basílica leonesa que guarda tus restos se inicia nuestra gira. En las próximas semanas, cantaremos por el mundo las melodías de la liturgia que tú, Isidoro de Sevilla, impulsaste para culminar la unificación religiosa de los visigodos…» (pág. 132, Francisco Mesa Varela, «A punta seca»).

 


lunes, 16 de septiembre de 2024

ANTOLOGÍA 2023: LA DESPEDIDA

 



LA DESPEDIDA
 
 
Tomo tu mano e intento aplacar el temblor de una vida que pugna por permanecer en un cuerpo desdibujado entre las sábanas. Me ha llevado varias lunas llegar hasta tu lecho, pero la fortuna me ha recompensado y he llegado a tiempo para despedirme de ti.
 
Te hablo con ternura del legado que has dejado a las generaciones futuras, de cómo esperaba ansioso las epístolas en tu último concilio, donde con entusiasmo querías promover la formación cultural del clero, pero solo me respondes con estertores de muerte.
 
Mojo un pañuelo con agua y te lo paso por la boca para humedecer tus labios resecos; recuerdo cuando nos conocimos, solo era un simple arcediano, pero ya viste en mí un potencial que ni yo me creía, pensabas que iba a llegar lejos y mírame ahora, obispo de Zaragoza.
 
Me sorprendió cuando hace unos años me enviaste tus Etimologías, no te voy a negar que me costó mucho asimilar toda la sabiduría que rezumaban esos escritos, pero con paciencia y determinación conseguí catalogarlos y dividirlos por capítulos; querías transmitir el saber antiguo para que no se perdiera y lo conseguiste, gracias a ti, ahora perdurará para siempre.
 
Te miro y aún reconozco tu naturaleza, tan testaruda que impulsó la conversión de los visigodos a nuestra fe católica ganándote la amistad de sus reyes.
 
Limpio mis lágrimas, no quiero que me veas llorar, Isidoro, fuiste mi maestro, el hombre más erudito de todos los tiempos y el elegido por Dios para salvarnos de la marea de barbarie que nos amenaza.
 
 
Gema Valdericeda Falcó
Licenciada en Comunicación Audiovisual
Trabaja en el Patronato de Cultura del Ayuntamiento de Fuenlabrada
Amante de las palabras, todas dedicadas a Martín
(XVII Antología)
 
 
 
 
 

viernes, 13 de septiembre de 2024

ANTOLOGÍA 2023: PIETAS

 



PIETAS
 
 
4 de abril del 636, Isidoro, hijo y obispo de Dios
 
 
Hoy, cuando mi cuerpo es viejo y débil, como débil es todo lo que vive fuera de ti, llegada la hora de alejarme del mundo de las cosas naturales, hechas ya las penitencias y escritas ya las obras que ha movido tu pluma divina, mi pensamiento es para las muchas gentes ignorantes de los pueblos de Hispania y para los herejes priscilianistas, gnósticos y maniqueos que aún no comprenden tu creación ni el papel central del hombre en la Tierra.
 
Tiemblan las gentes que todo ignoran ante el rugir del Etna, imaginado en su interior las fraguas de Hefesto movidas por el soplo monstruoso de Tifón, y ante el aire infecto de la peste que transportan los vientos y las nubes y que no deja respiro ni aviso, arrastrando campos, almas y bueyes a la muerte con su putrefacto aliento.
 
Tiemblan de superstición sin entender los cursos del Sol y la Luna que regulan las divisiones del tiempo. Temen a los planetas, sin comprender la prima causa y que nada sucede si no es por ella y que la destrucción es a veces condición del orden de la naturaleza; que la peste es voluntad de Dios y no la mueven paganos cíclopes ni gigantes, sino la ira de Dios que solo grandes pecados merecen. Tiemblan ante la muerte que no entienden, ante su propia muerte.
 
En esta hora en que presiento feliz tu divino cielo y dejo este mundo en el que tanto amé tu reflejo, qué más puedo darles, Señor, si ya les di tu conocimiento que se revela en la naturaleza. Juan y Esparcio, obispos como yo de Dios en la Tierra, repartid mi última hacienda, entregad mi pan a los que tienen hambre de pan y repartid mis libros entre aquellos que tienen hambre de alma.
 
Para los que no te comprenden, Dios mío, es mi última plegaria.
 
  
I. M. Fernández
(XVII Antología)
 
 
 
 
 

jueves, 12 de septiembre de 2024

«RE-VIVENCIAS»: VITALISMO

 


 

              VITALISMO  

                                           

Hay que tener un concepto vitalista de la vida.
 
Hemos de morir un día
y la vida es nuestra única oportunidad.
 
Si somos vitalistas,
cada instante de la vida tendrá interés.
 
El vitalismo nos da el grado de optimismo necesario
para que la vida no se nos antoje absurda o vacía.
 
Hay personas vitales que transmiten a su alrededor
sentido de actividad, de progreso y diría que hasta de entusiasmo.
 
El vitalismo debe nacer de una fuerza interior.
 
Siempre podemos hacer algo; por nosotros o por los demás.
 
La vitalidad y la generosidad son dos manifestaciones que normalmente van unidas.
 
El vitalismo es un concepto, una categoría mental
por encima de la vitalidad que tiene relación con un concreto estado físico.
 
El vitalismo se puede dar en las naturalezas débiles
y hasta enfermizas.
 
La fuerza vital está en la mente y en la voluntad,
que superan toda dificultad.
 
Hay que revitalizar conceptos que nos ayudan a ser más felices
como el amor, la familia, el trabajo, la solidaridad.
 
El vitalismo hay que entenderlo como postura positiva
ante la encrucijada humana. 

(Fernando Orlando,1987)


miércoles, 11 de septiembre de 2024

ANTOLOGÍA 2023: DOCTOR HISPANIAE

 



DOCTOR HISPANIAE
 
 
Después de levantarse, el anciano se asoma a la ventana (fenestra: ferens nos extra) y extiende su mirada sobre la llanura tras de la cual se adivina, envuelto en bruma, el perfil azulado de una sierra lejana. A pesar del dolor de huesos que lo atenaza a esas horas, toma la pluma y se dispone a escribir en el libro en que trabaja desde hace años. Pero esta mañana algo se lo impide. En los últimos días, después de terminar el capítulo sobre el mundo y sus partes, ha empezado a tener extraños sueños que atribuye al calor de las noches de verano en Sevilla. O quizá sea el río, piensa, pues cuando escucha a los pescadores que habitan junto al castillo de Triana no deja de preguntarse dónde termina el mar en el que, tras correr por tierras bajas (quod humili solo decurrat), acaban muriendo aquellas aguas.
 
Y eso lo inquieta. Ha soñado con ríos más largos aún y más anchos, con llanuras interminables y montañas que escupen fuego, con árboles que llegan hasta el cielo y en los que anidan pájaros cubiertos de plumas de mil colores. Al fin, la noche anterior ha visto en el sueño a unas extrañas criaturas desnudas y tatuadas, con labios y orejas hendidos por adornos de hueso que le susurraban al oído en una lengua desconocida.
 
Ahora sabe que todo aquello tiene un nombre, pero las palabras que ha escuchado, y que intenta retener desesperadamente, se desvanecen al despertar. ¿Habrá algo, se pregunta, que él no conozca y de lo que no pueda dar cuenta en ese libro que pretende contener dentro de sí el orbe entero? O peor aún: ¿habrá algo que ni siquiera hayan conocido aquellos por los que él sabe todo cuanto sabe?
 
El río, se dice, tiene que ser el río y, empuñando la pluma, continúa: De auctoribus conditarum urbium plerumque dissensio invenitur
 
 
      
Mauricio N.
(XVII Antología)
 
 
 
 

martes, 10 de septiembre de 2024

ASÍ ESCRIBEN NUESTROS AUTORES

 




«… Cuando se apagó la luz de Roma y las sombras invadieron Europa desde el norte, los conocimientos acumulados hasta entonces amenazaban con perderse para siempre. Para evitarlo, Isidoro de Sevilla dedicó un cuarto de siglo a recuperarlos y a elaborar con ellos una especie de ingente Wikipedia de tinta y pergamino. Durante los siete siglos siguientes, fue la principal fuente de saber en toda la cristiandad. Sus múltiples ediciones contribuyeron a iluminar la Edad Media y a adelantar la llegada del Renacimiento…» (pág. 130, José Corrales Pérez, «El gigante de Sevilla»).


lunes, 9 de septiembre de 2024

ANTOLOGÍA 2023: TESTIMONIOS DE UNA TÓRTOLA

 



TESTIMONIOS DE UNA TÓRTOLA
 
 
Durante la mañana da pasos serenos por los caminos que atraviesan los jardines del patio. Suele detenerse a contemplar los movimientos y sonidos que habitan la sombra de los árboles y a respirar profuso aire diáfano cerrando sus ojos a esos destellos de sol que, certeros, logran atravesar los resquicios del follaje.
 
Durante la tarde, toma asiento ante su escritorio de espaldas hacia la ventana y la tibia luz, la luz de un astro cansado que ahora avanza de a poco, imperceptible, hacia el montañoso poniente. A veces, él lleva consigo algún papiro y, tras desenrollarlo, penetra su contenido con el ariete irrompible de su entendimiento, esa inteligencia que está acostumbrada ya a conquistar con facilidad cualquier intrincada retícula de datos, proposiciones, razonamientos, reflexiones. Otras veces, sobre la superficie del mueble, deposita, uno a uno, todos los instrumentos que se requieren para el proceso de escribir: cristalino tintero, pluma seca y afilada, espesas láminas blancas. Yo lo observo desde lo alto de la bóveda, ladeando ágilmente la cabeza y echándole suave murmullo. Él permanece en tenaz disciplina hasta las más profundas horas nocturnas extrayendo infatigable del frasquito de la tinta, gota a gota, todas las palabras y los números que dilucida su mente, hasta que sus nudillos se tiñen de frío, dolor y cansancio y sus ojos menguan como dos lunas a fin de ciclo. Entonces se detiene, se levanta y en voz baja me habla de cuanto ha escrito. Habla de las mediciones exactas que rigen su pensamiento, de los hilos que ensartan las palabras de su lengua, del poder en la Tierra, del poder de Dios y, por sobre todo, del cariño que le tiene a esta región, Hispania, que tan región suya es también mi región.
 
          
Javier Francisco Moreira Alarcón
Escritor independiente, ganador en la categoría de cuento del Premio Eduardo Abaroa en su décima versión, y otras menciones
(XVII Antología)
 
 
 
 

viernes, 6 de septiembre de 2024

ANTOLOGÍA 2023: DE SAN ISIDORO A BARTOLOMÉ DE LAS CASAS

 


DE SAN ISIDORO A BARTOLOMÉ DE LAS CASAS
 
 
Hace años estudiaba la obra de Bartolomé de las Casas y, ahora por puro azar, he leído pasajes de las Etimologías, de san Isidoro de Sevilla y, sin existir ninguna lógica, observo un cierto paralelismo en el pensamiento de ambos autores.
 
Extraña vivencia que me traslada a la ficción de proyectar pensamientos del siglo vi al xvi amalgamados con años de estudio de historia del derecho. En Sevilla nació el maestro de la Europa medieval y casi diez siglos después, en Burgos, nació el maestro del derecho internacional y gran defensor del indígena.
 
Creía que fueron los dominicos los pioneros en la defensa de las personas y del indígena americano, son ejemplo de ello: Francisco de Vitoria y Bartolomé de las Casas.
Errática era mi visión, ahora empiezo a comprender el puzle filosófico de algunos de nuestros religiosos.
 
Pues sí, allá en el siglo vi un obispo sevillano decía que «aunque seas el más alto, ten humildad» y que «entiende que se te prueba en la prosperidad para que no te exaltes».
 
Este reencuentro con el pasado me vislumbra un nuevo horizonte y tengo la osadía de afirmar que el principal representante de la filosofía cristiana en el siglo vi y principios del vii sentó los pilares de lo que ahora denominamos derechos humanos.
 
Gracias, san Isidoro de Sevilla, por hacerme entender que «no tengas curiosidad de conocer las cosas ocultas» porque las más transcendentes las tenemos ante nuestros ojos y parece que no las queremos ver.
 
               
Francisco Javier Díaz Aguilera
Cádiz
(XVII
Antología)
 
 
 
 

jueves, 5 de septiembre de 2024

«RE-VIVENCIAS»: SOÑAR

 




          SOÑAR
 
Que vas a superar todas las crisis y dudas,
que vas a saber afrontar la suerte suprema,
que vas a ser respetado y hasta querido,
que vas a sortear el dolor y la desgracia,
que vas a soportar las ausencias,
que vas a convivir con la soledad,
que vas a vencer al miedo,
que vas a creer en el más allá,
que vas a amar a todos,
que vas a perdonar a todos,
que vas a compartir con todos.
 
Quiero soñar todo esto
y creer que soñar es amar y ser amado.
 
Soñar, amar, vivir, morir…
el misterio.
 
 (Fernando Orlando,1967)
 
 


miércoles, 4 de septiembre de 2024

ANTOLOGÍA 2023: DESCUBRIMIENTOS

 



DESCUBRIMIENTOS
 
 
Para mí, todo empezó con un sello del V Centenario del Descubrimiento de América, emitido en 1992. Ahí, la imagen de san Isidoro golpea la razón. ¿Quién pensaría en relacionar a ambos, si entre la época de Isidoro y los Reyes Católicos median ocho siglos? El texto que la acompaña nos da pistas.
 
Sabemos que el santo y sabio obispo de Sevilla dedicó su vida al estudio, poseía conocimientos enciclopédicos en todos los campos del saber y su pensamiento fue muy valorado como elemento básico para los estudios durante la Edad Media.
 
En su Loa a España (Historia gothorum), la sitúa en el centro del orbe —entre Oriente y Occidente— y, anticipándose a los tiempos, la ve con un fecundo futuro como madre de naciones y forjadora de pueblos.
 
Con esa visión profética, en las Etimologías, su obra cumbre, encontramos la frase impresa en el sello —Extra tres partes orbis, quarta pars trans oceanum est, quae solis ardore incognita nobis est— en alusión a la existencia de otro continente más al oeste.
 
Partiendo del mapa de Ptolomeo, con los tres continentes entonces conocidos, Isidoro lo enriquece con hitos bíblicos y resuelve con inteligencia la polémica del momento combinando una Tierra plana bajo la bóveda celeste esférica. Ubicó el paraíso terrenal o jardín de las delicias en Oriente.
 
Siglos después, la cartografía había evolucionado, y Colón manejaría ese planisferio de Isidoro, junto con muchos otros, al preparar su gran viaje transoceánico.
 
Y, cómo extrañarse de que el descubridor, al conocer aquellas tierras, pensara que había llegado a las Indias, a Oriente, a ese paraíso descrito por el santo español, dada la exuberante vegetación propia de un lugar deleitoso y salvaje.
 
¡Qué hermosa fantasía navegar aunque sea por los mapas!
 
Y este fue mi particular descubrimiento.
 
 
                 
Covadonga Grijalba Castaños
Residente en Almería
Premios: tercer premio en el Concurso Literario Nacional de la UDP (2003) y finalista (2006)
Publicaciones en poesía: Miradas poéticas de dos en dos, editorial Universidad de Almería (2008) y Nubes en archipiélago, editorial Torremozas (2009)
Antologizada en los Premios Orola 2009, 2015, 2016, 2017 y 2020
(XVII
Antología)