sábado, 23 de mayo de 2015

FACER ESPAÑAS 2015: LAS TRES VIVENCIAS GANADORAS


El viernes, 22 de mayo se falló el IX Premio OROLA de VIVENCIAS, en los salones de la Real Gran Peña de Madrid, donde se reunió el Jurado del Premio.
Resultaron ganadoras las siguientes vivencias:

Primer Premio de 3.000 euros a la Vivencia titulada 
LAS PALABRAS MEJORES, escrita por César Ibáñez París, de Soria

Segundo Premio de 2.000 euros a la Vivencia titulada 
BRINDIS DE UNA TARDE DE VERANO, cuyo autor es Alejandro Martín Navarro, de Sevilla

Tercer Premio de 1.000 euros a la Vivencia titulada 
"FACER ESPAÑAS",  de Manuel Laespada Vizcaíno, de Manzanares, Ciudad Real


PRIMER PREMIO
Las palabras mejores

Nunca he viajado a la América que habla español, pero la he leído. El páramo incendiado de Rulfo, la sangrienta revolución de Carpentier, los inflamados y terrosos versos de Neruda, los mundos mentales e infinitos de Borges, la húmeda melancolía de Onetti, la desmesura exacta de García Márquez, la violencia y el humor de Vargas Llosa, la intrincada imaginación de Cortázar, La Habana resucitada en la memoria de Cabrera Infante. No es lo mismo, lo sé. Las palabras revelan, ante todo, al autor, y solo secundariamente a la tierra, al paisaje, al continente asombroso; pero, por otra parte, solo las palabras explican, inquieren, comprenden, hacen dudar, ponen en valor y en solfa lo que hay. Es decir, que la vivencia, sin el lenguaje que la hace entendible y pensable, sería cúmulo informe de imágenes y sensaciones, fluido más o menos agradable en el que flotar, pero en el que sería imposible nadar, avanzar. En cambio, la vivencia de las palabras mejores contiene la experiencia y el conocer de los que saben más que uno, de quienes antes que nosotros han sido capaces de rasgar el velo de lo aparente y penetrar en el fundamento, en la savia de la realidad. La vivencia hecha lenguaje es útil; hecha gran literatura, imprescindible.

Nunca he viajado a la América que habla español, pero la he leído.


SEGUNDO PREMIO
Brindis de una tarde de verano


A lo lejos el sol se hunde en la marisma.
Yo la contemplo desde los altos cerros
y veo la montaña de sal oscurecerse.
La vida sabe a poco en los labios del hombre:
apenas un destello, un relámpago sordo.

Pero abril es eterno debajo de la luz
que se derrama, lenta, sobre las parras verdes
y sobre los olivos de esta tierra. Los hombres
vuelven de sus labores con cestos, a lo lejos,
y las mujeres llevan delantales manchados.
Caminan sobre el manto de la tierra
recogiendo las uvas verdes de la alegría.
España, vieja rueda de trabajos y años
donde se muele el tiempo, la dicha y los cantares.

Pero el vino es liturgia de la tierra
que levanta en su altar las plegarias del mundo.
Por eso alzo mi copa,
en las últimas luces de este día
antes de que las sombras inunden nuestros ojos.

Brindo por nuestros cuerpos tumbados en la hierba
de un campo interminable, por la dicha
de unos ojos que miran otros ojos
como un espejo puro de metal y fuego.
Brindo por las mañanas de San Juan,
por los niños corriendo por los largos pasillos,
por las luces nocturnas de la ciudad dormida,
por las dunas cubiertas de enebrales
con hileras de hormigas avanzando en sus hojas,
y brindo por las calles infectadas del puerto.


TERCER PREMIO
"Facer Españas"



I
“Miré los muros de la patria mía…”
(Francisco de Quevedo)

A esta patria tan suya y tan amada
le surcan todavía por sus venas
dolores viejos, repetidas penas
que aún no han cicatrizado. La dorada
época de esplendor quedó atrapada
en los libros de historia. Hoy apenas
del muro se recuerdan sus almenas
y el esplendor arcano, casi nada.
Mas si este pueblo, corazón y arcilla,
expandió sus raíces a otro mundo,
merece, justo aval, la confianza.
Descuidad, don Francisco, su semilla
germinó en un subsuelo tan fecundo
que aún florecen gavillas de esperanza.

II
“No he de callar, por más que con el dedo…”
(Francisco de Quevedo)

No es menester que calle todavía,
precisamos saber que su garganta
ante lo injusto clama y se agiganta
henchida de razón y gallardía.
No es menester que calle, cada día
la sinrazón a la ternura espanta,
como si Cierzo con su voz quebranta
al dedo acusador. Y le diría
que en este deambular precipitado
es cuando más su voz se necesita
para alcanzar la luz. Llenar el hueco
que a la palabra le hemos usurpado.
Y una vez más acudirá a la cita,
si no su voz veraz, lo hará su eco.


viernes, 22 de mayo de 2015

ANTOLOGÍA 2014: SEIS LETRAS

SEIS LETRAS

Es una tierra ennoblecida por millones de héroes anónimos
que han luchado y luchan por su libertad.

Solidaria como nadie, siempre dispuesta a ayudar y a compartir
con quien lo necesite.

Plural en todos los sentidos como podemos ver recorriendo
su geografía y estudiando su vasta cultura.

Amputada cada vez que un hijo suyo tiene que irse fuera
para desarrollar su talento bien sea por problemas económicos
o por ideología.

AÑorada por todos los que emigraron,
unas veces por necesidad y otras por espíritu aventurero.

Amante de sus fiestas, la buena comida y de conservar
las tradiciones heredadas de sus antepasados.
Abierta a la buena gente. Alegre a pesar de los pesares.

Cristina Perea Cárdenas
CARTAGENA (Murcia)
(VIII Antología pág. 237)

jueves, 21 de mayo de 2015

ANTOLOGÍA 2014: ERES EL ECO

ERES EL ECO

(Dedicado a mis dos tíos españoles: Antonio Patiño
y José Antonio de las Rivas que “facieron su propia España”
lejos de su amada tierra)

España: eco eres del hombre, incendias sus orejas
con las voces del jaguar y el águila tejidas
en la mítica memoria, tocadas por la brizna
zaína de la cordura, la que marcó tu luna:
gotas del alma llorando, dueña eres de certezas
y claro está de mis dudas…

Península etérea, mar primigenio, abriendo
el non plus ultra a los sueños.

Mineral eco. Silencio ondulante encarnado
en mi presente, lugar sin tiempo, libertario
idioma, lengua de hombres, nubes de aliento como
si fueran la piel del propio rayo caen encima
de las eternas montañas del pensamiento, voces
de los primeros influjos cubren tu historia a veces
gris, a veces soleada…
Sangre moruna te habita
llenando al ignoto mar de inéditos caminos.

España: eco que transita a lomo de lunas llenas,
modelando su razón entre mareas de alba,
puerta de ojos oyen cascos en desbandada sobre
la cruz del tiempo…

Encrucijada de razas, dueña de mis anhelos
continente peregrino besando occidentales
islas, ecos de una misma madre, con diferente
aliento, entreverando africanos relámpagos
con extensas, filipinas nubes y besos cálidos del Caribe…

Febril cosmos liberando sus pasos en la arena
húmeda de una plegaria.
Columnas son de mi sangre mezclando entre dolor,
lluvia e ilusiones, a sus ríos, montes, dioses, ciudades
y pirámides, abriendo
destinos… ¡Mestiza luz engendrando mis letras!
¡En su centro habita el horno de tu presencia!

Eres eco fugitivo de la noche, semilla
del movimiento de mares y veranos, violento
surco de estruendosos días, cosechador de viñas
en siglos ebrios de lluvia, ahí nacen anhelos,
ahí mueren y renacen ecos de mis palabras
encendiendo las antorchas de sigilosas albas
entre océanos de voces…

Donde se amalgaman ecos de diferente acento
en cambiantes horizontes
sobre un mar de sueños, plata, oro, poder y fe.
Vital piedra del sol (eco del divino alimento).
Allí la polifonía
de nuestra piel se entrevera
con la cósmica visión
de mis ancestros, pupilas
tristes que al vacío miran, contradictorio tiempo…
la visión de los vencidos;
el polvo de la esperanza.

¡Eres eco de tus hombres…, escultora de lúcidos silencios!

Enrique Fernando Arauz Flores
Médico y poeta
PUERTO VALLARTA (México)
(VIII Antología pág. 233)

miércoles, 20 de mayo de 2015

ANTOLOGÍA 2014: HISPANIA

HISPANIA

Caverna de Altamira, Santillana,
placenta de Atapuerca, fértil fuente,
sois útero de piedra, recipiente,
sois cuna de mi raza tan lozana.

La mater generatrix soberana,
diosa nutricia, luz de nuestra mente
troquel de una aguerrida y noble gente
que derivó en la brava hueste hispana.

Pueblo de atlantes, médulas de oro,
la rica tierra ibérica han forjado;
cien etnias lucrarán la piel de toro.

Con barro de esta tierra fui amasado,
y cuando llegue el fin, al cielo imploro
que en esta tierra sea yo enterrado.

José Mampell Llop
Nacido en FORCALL (Castellón) en 1927
Jubilado. Ha ejercido la docencia y subdirección en el Colegio FEM
(VIII Antología pág. 231)

martes, 19 de mayo de 2015

ANTOLOGÍA 2014: CEREMONIA INCA

CEREMONIA INCA

Aferro a mis manos mis certificados oficiales
que mi padre nunca tuvo,
voy con ellos por la vieja ciudad
donde hay de todo y nada,
hay que decirlo.
Un día no sé cómo ni cuándo
los antiguos dioses
se me presentaron entre las avenidas sedientas
entre hombres y oficinas
que olían a anticuario
entre desempleados que parecían emerger
de las plazas sin nada en los bolsillos.
Yo con mi sudamericano corazón
recordé Lima y sus microbuses
las monedas de sol, el inti,
los perros rabiosos
amarrados a un árbol,
y recordé que a veces para purificarlo todo
es necesario sacar las vísceras
y leerlas al sol
como los antiguos sabios.

Silvia Llanto Cadenas
(VIII Antología pág. 229)

lunes, 18 de mayo de 2015

ANTOLOGÍA 2014: ESPAÑA EN EL CORAZÓN DE MI GUITARRA

ESPAÑA EN EL CORAZÓN DE MI GUITARRA

Me besaron con canciones de Moustaki, soñé con él, sefardí de
Egipto, que llevaba a España en el corazón de su guitarra; hijos
de Toledo y de Granada, mis ancestros de Sefarad: “Ont pris la route
des nómades./ L’Espagne au coeur de ma guitare./ Des Asturies à
Gibraltar/ L’Espagne au fond de ma mémoire... ”.
Luego aprendí de la biblioteca de Elias Canetti, sus abuelos le
cantaban canciones de cuna en español, Manzanitas coloradas, en
ese otro español, que juega con el tiempo, resistente y valiente, que
amaba sin olvido, que sabía perdonar como se perdona a la madre,
español que mantengo en el corazón de la piel; yo que no sé cantar,
le puse música a su lengua absuelta.
Más tarde en el amor abrí los ojos de la mano de Albert Cohen,
enamorado y seductor que buscaba a Europa para que nos quisieran,
que gritaba de adulto desde el niño de diez años: ¡Oh, vosotros,
hermanos humanos!
¡Oh, España! Sefarad región sin territorio. Españoles viajeros en
Turquía y Canadá fundaron Nueva York, y trabajaron el caucho
en Brasil desde Tetuán. Internacionales en Tánger, querían mirar
como Espinosa pulidor de lentes, pensamiento libre, se encuentran
hoy con otros que se quedaron, cambiando la historia siendo más
España.
Sefarad es Cantabria, Cataluña, País Vasco, Castilla, Baleares,
Canarias, Extremadura. Quisieron ser uno cuando la unidad
es ser uno y lo otro. Solo somos Sefarad si hay España.
España es cuerpo y muchas almas.

Esther Bendahan
MADRID
(VIII Antología pág. 227)

jueves, 14 de mayo de 2015

ANTOLOGÍA 2014: EL OLOR DE LOS RECUERDOS

EL OLOR DE LOS RECUERDOS

Me gustan los días grises y oscuros.
Esos días de invierno
nublados, fríos, lluviosos,
con un inolvidable olor a chimenea
esparcido por el aire.

Me gustan.

Me gustan los recuerdos de mi niñez
en los que miraba al cielo
y soñaba con ser feliz;
en los que me asomaba
a la pequeña ventana del mundo
y todo olía a madera, a humo,
a pan recién horneado,
a manzanas asadas…

Y me gusta tanto
porque todo me huele a ti.
Porque atesoro los olores del pasado
y el deseo de regresar a mi tierra,
a mi España,
guardados en el alma con mi vida.

Porque sin ellos no poseería fortuna alguna
ni conservaría sueños que cumplir.
Porque sin ellos,
al final, no tendría nada.

Mª Isabel Rodríguez Fuertes
Nacida en CANGAS DEL NARCEA (Asturias), reside en Oviedo
(VIII Antología pág. 225)

miércoles, 13 de mayo de 2015

ANTOLOGÍA 2014: DE CORAZONES Y VOCES

DE CORAZONES Y VOCES

Una de las varias letras propuestas para el himno nacional decía:
“Viva España/ cantemos todos juntos/ con distinta voz/ y un solo
corazón”. No supe a qué hacía exactamente referencia hasta que lo
comenté con un latinoamericano, que me dijo que, seguramente,
se refería a un concepto que en su país usaban mucho: "la madre
patria”. Sin entender lo que quería decir, le pregunté de qué país
venía. Entonces me miró extrañado y me respondió: “Me refería a
España”.
La siguiente pregunta que le hice fue: “¿Aun sabiendo lo que nos
separa a los hispanos de ambos lados del Atlántico, por qué no
trataremos como a nuestros hijos a aquellos que nos consideran su
madre?”.
Y su respuesta fue aún más sorprendente para mí: “Porque después
de tantos años, ya no quedan padres ni hijos. Solo hermanos”.

Álvaro Laviana Marín
SEVILLA
(VIII Antología pág. 223)

martes, 12 de mayo de 2015

ANTOLOGÍA 2014: ESPERANZA FRENTE AL MAR

ESPERANZA FRENTE AL MAR

La esperanza frente al mar.
Amigos, amor, bienestar.
Princesa espiritual,
protégeme del caos
con tu caridad.
La caridad de tus caricias.
Tu mirada es brillo de mar.
Gaviotas y pájaros, volad.
Enfrentaos al pánico
en minutos de soledad.
Gran inmensidad.
El sol ilumina las rocas y las olas.
Obras de caridad, ciclo vital, paz mundial.

Ismael Fuente Gámez
Quiromasajista
SANT JOAN DESPÍ (Barcelona)
(VIII Antología pág. 221)

lunes, 11 de mayo de 2015

ANTOLOGÍA 2014: HECHIZO

HECHIZO

En el casco antiguo de Santiago de Compostela bosteza la tarde
de un sábado de invierno benigno, a pleno sol.
Entre los muros, apenas soledad y silencio.
Sobre los edificios románicos con altísimos portales y paredes
blanquecinas, los reflejos de luz enceguecen.
Solo algún árbol de camelias, colmado de flores moradas, aporta una
nota vibrante entre tanto sosiego.
De a poco, como si se colara entre las hendiduras, surge una melodía
que envuelve, produce ecos y se despliega hacia otra dimensión.
Evoca rumores de batallas, voces de sufridos picapedreros, de
cánticos litúrgicos en latín, en gallego, en castellano, para alabanza
del Señor.
En ella laten las palabras esperanzadas de millones de peregrinos
que forjaron hermandad a través del Camino de Santiago.
Suena como violín. O una quena. Tal vez un sicu de la región
andina de Sudamérica, mi patria grande. Pero no: es una gaita
que transporta al éxtasis con su sonido y sus ritmos: jota, canción,
muñeira, villancico, polca… Esta música abarca, integra, se expande,
contiene disparidades, promueve identidad y un intenso sentido
de pertenencia.
La vista descubre la puerta de un pequeño negocio: una disquería.
El hechizo emana desde adentro: es la grabación de un gaitero
prodigioso. Interpreta canciones gallegas para el cuerpo que goza
y el alma que baila. El mundo entero vibra: se reconoce en ellas.

Mª Rosa Balducci
Profesora de Filosofía en la Universidad de Buenos Aires
BUENOS AIRES (Argentina)
(VIII Antología pág. 219)


viernes, 8 de mayo de 2015

ANTOLOGÍA 2014: EL PATIO

EL PATIO

En Andalucía no tenemos jardines, son un artículo de lujo que no
nos podemos permitir.
Tal vez por eso tenemos patios, que con sus coloridos mosaicos
suplen la cascada de verdes, rojos, azules y ocres de un jardín
de verdad. Los patios han sido, tradicionalmente, el centro de la
vida andaluza: elemento distribuidor de estancias en las casas, zona
fresca y aireada donde descansar en los días de calor, o donde salir
de noche a mirar las estrellas mientras se comparten secretos.
Mi abuelo tenía una casa con patio. No era un patio de azulejos
y macetas. Era un patio encalado, siempre blanco nuclear,
con el suelo de albero y un limonero en el centro.
El patio siempre estaba inundado por los aromas del árbol: a azahar
o a cítrico frescor, su presencia se hacía patente mucho antes de
entrar en la casa, antes de verlo, incluso antes de aparcar el coche en
la estrecha callejuela de un solo sentido.
Ayer ese patio me vino a la mente. Y me di cuenta de la infancia
tan feliz y afortunada que tuve corriendo bajo el limonero, bebiendo
limonadas que mi abuela exprimía y azucaraba, creyendo ser
princesa cuando mi primo Juanito zarandeaba el árbol y una cascada
de fragantes flores caía sobre mi cabeza, y yo daba vueltas sobre mí
misma con los brazos abiertos y los ojos llenos de estrellas.
Ese limonero, enorme y majestuoso, ha vivido en mí todos estos
años, esperando ser recordado, esperando savia nueva, vida nueva,
tierra fértil y un corazón que le dé vida.
He aquí mi humilde homenaje.

Laura Baena Ruiz
SEVILLA
(VIII Antología pág. 217)

jueves, 7 de mayo de 2015

ANTOLOGÍA 2014: SENDEROS DE SENSACIÓN

SENDEROS DE SENSACIÓN

I. LA PRIMAVERA

El soplo de mis sentidos,
el barro de mi alma,
la arcilla de mis palabras.

Toco esta tierra y toco
las entrañas de mi alma.
Huelo esta tierra y huelo
el aroma de mi alma.
Miro esta tierra y miro
la quietud de mi alma.
Oigo esta tierra y oigo
la voz de mi alma.
Beso esta tierra y beso
mi propia alma.

II. EL VERANO

Tarde eterna
suelo eterno, luz apacible
y tiempo…, mucho tiempo.

Callado escucho
la voz seca de estas espigas.
Callado miro, hipnotizado,
cómo vienen y van
estas espigas mecidas como agua de mar.
Callado, callado, callado
observo cómo estas olas llegan a la orilla
de la cuna de mi infancia,
de la cuna de mi tiempo,
de la cuna de mis recuerdos.

III. EL OTOÑO

L’Autunno
Concerto in Fa Maggiore RV 293

Déjame morir aquí…,
entre los olivos y las vides
que ocultan mi ánima,
entre el amanecer y el anochecer
que tiñe mi ánima.
Déjame morir aquí
entre el silencio y la paz
entre el vino y el aceite
que curan y sosiegan mi ánima.

IV. EL INVIERNO

El suelo agrietado y seco
de esta tierra
es la misma piel de cuero
de mis sentimientos.

Reunidos todos,
todos los dulces y amargos almendros.
Reunidas todas,
todas las fértiles vides.
Reunidos todos,
todos los ubérrimos olivos…,
han decidido, por unanimidad,
acogerme en su seno
y me han pedido
que deje aquí, para siempre,
el resto de mis sentimientos.

Hic iacet, pulvis, cinis et nihil.

Manuel Fernández de la Cueva Villalba
Doctor en Humanidades y Ciencias Sociales
Profesor de Filosofía
(VIII Antología pág. 213)